ENCIERRO AJALVIR 1/2/14
Como ocurriera el viernes por la
noche, bastante retraso para empezar el encierro. Estaba programado a las 11:00
de la mañana, y hasta pasadas las 11:30 no dio comienzo. Antes, a las 11:15 un
coche recorría las calles del encierro diciendo por megafonía: “los toros que se van a soltar en el encierro
son para la lidia de la tarde, SE RUEGA, no recortarlos”. Esto empieza mal, no es mejor decir que según
el reglamento taurino de la Comunidad de Madrid, por cierto el peor de toda
España, esta prohibido recortar a los toros en la calle, ya sean de capea o de
lidia. También, no es mejor decir como va a ser el encierro, ya que en Ajalvir esto
es una incógnita, no se sabe si van a ser de uno en uno, de dos en dos, o en
manada, esto último raro porque la manga es muy estrecha.
Sobre las 11:20, agentes de la
Guardia Civil hablaban con los Policías Locales, junto a ellos miembros de Protección
civil, en la primera esquina del recorrido del encierro. Entre otras cosas, se
oía, “los toros de uno en uno, y si un
toro se queda, rápidamente los mansos de vuelta”. Fue a esa hora cuando se
decidió el orden de salida???, queremos pensar que no.
Con otra de las cosas que nos
encontramos es que la tradicional capea de Ajalvir, esa que se lleva haciendo
toda la vida, no se iba a celebrar. Si por algo era conocido Ajalvir, era por
sus capeas, más que por sus encierros, ya que antiguamente lo que se hacía era soltar
toros en la calle. La Comunidad de Madrid, blinda las corridas de toros, pero
el festejo tradicional, el festejo de toda la vida, se lo esta cargando, con un
reglamento de festejos populares que no respeta las tradiciones de los pueblos.
Es una incoherencia total, por un lado apela a la tradición para preservar las
corridas, y por otro deja en el olvido los festejos populares. Pues señores de
la Comunidad de Madrid, para que se llenen las plazas de toros, para que siga
habiendo negocio, para eso tiene que haber afición, y para que haya afición, se
tiene que invertir en el festejo popular y ayudar a los ayuntamientos con un
reglamento de festejos populares como es debido.
Volviendo al encierro, se corrieron
seis toros soltados de uno en uno de Jose Luis Pereda-La Dehesilla. Cuatro para
los matadores de toros David Luguillano y Morenito de Aranda y dos para el
torero a caballo Roberto Armendáriz. Ganadería con procedencia Núñez.
Toros fuertes, hechos, con kilos
para ser una plaza de tercera. Los toros salían sin querer nada de los mansos,
y pese a las solicitudes por parte del ayuntamiento a no recortar a los toros,
estos eran citaos y rodados en la calle Mayor, en la calle de salida. En casi
todas las carreras los cabestros fueron por detrás, y los toros muy rápidos
por delante. El tercero hizo una derrapada preciosa en la primera curva, el resto
iban hacia la iglesia, cruzando la calle de lado a lado y volviendo a cruzar
hacia la zona de talanquera. Al llegar a la mitad de la calle fuente, entre las
calles Covachuelas y Pilar, los toros se templaban, entre el pequeño repechito
que tiene la calle, el estrechamiento y la oscuridad, hacía que los toros
aminoraran la marcha. También es el sitio donde empieza a haber más corredores.
Al llegar a la doble curva derecha izquierda, a la altura de la calle Pilar, y
al ir los bravos solos, sin mansos, estos se desorientaban, veían luz y tenían
momentos de duda, incluso uno de los toros se dio la vuelta, poniendo en apuros
a un experto corredor, que dudo en correr hacia la salida o rodar al toro, y
entre la duda y el bordillo, tropezó y cayó de rodillas contra la talanquera. Por
suerte el toro también dudo, y atendió a los cites que hacían los mozos, volviéndole
a conducir hacia la plaza.
En la calle Mayor uno de los toros
embistió en un par de ocasiones a un mozo que intentaba subirse a una ventana,
fallando en el primer derrote por escasos centímetros. Otros toros también
arrimaron bastante a las rejas de las ventanas del lado izquierdo. En la calle
Fuente, justo cuando acaba la talanquera del lado derecho, uno de los toros hizo
hilo a un corredor madrileño, propiciándole un derrote, teniendo el mozo que
cruzarse y tirarse literalmente volando al suelo. Este instante se vivió
también entrando en la plaza, quedándose inmóvil esta vez el chico en el suelo,
observando como le mira desafiante el toro en su trepidante entrada al coso
portátil de Ajalvir. Momentos de peligro los vividos en Ajalvir, por suerte sin
lamentar incidentes.
Otro tema a comentar es que entre
carrera y carrera volvían los mansos desde la plaza hasta el corral de suelta,
unas veces dos mansos, otras tres, pero en la última carrera salieron dos
bueyes junto al toro directamente desde el camión, pillando de imprevisto a
varios corredores, que no se esperaban que saliesen directamente desde el
camión. Ya que se desconocía que el camión transportaba 5 cabestros. Si se
recorre la calle con un coche con megáfono, es recomendable que digan que el
encierro va a ser con sueltas de toros de uno en uno y que en la última carrera
los cabestros no van a volver desde la plaza.
Comentar la gran afluencia de
público y de aficionados, tanto para correr como para ver el encierro, con una
plaza prácticamente llena, a pesar de no celebrarse capea posterior al
encierro. También se vio por las calles a un cámara de Telemadrid, dejamos a
continuación el enlace:
Desde hace bien poco, Ajalvir tiene
el privilegio de ser la primera localidad de España que celebra encierros con
los toros que son lidiados en la tarde. Antes ese privilegio era para
Valdemorillo. Ajalvir es una localidad cercana a Madrid, fundada por los árabes
que celebra sus fiestas en honor a San Blas y la Virgen de la Candelaria.
Siempre han tenido tradición los festejos populares taurinos, soltándose toros
por las calles y celebrándose capeas en la plaza. Desde hace unos años se
festeja una feria taurina, que abre los carteles del panorama nacional,
haciendo corridas de toros en el fin de semana más cercano al 3 de febrero.
El maestro Andres Santander recibiendo y rodando un toro que será lidiado por la tarde. que triste!! mas ejemplo
ResponderEliminar