ENCIERRO VALDEMORILLO 5/2/16
Primer encierro de las fiestas
de San Blas y la Candelaria de la serrana localidad madrileña de Valdemorillo. Como
es habitual es el primer encierro del panorama nacional propiamente dicho, es
decir, con los seis toros de la corrida a torear por la tarde soltados en
manada por las calles hasta llegar a encerrarlos en la plaza.
En esta ocasión corrieron seis
toros con las defensas claramente recortadas porque por la tarde iban a ser
lidiados por rejones. Los toros correspondían al hierro gaditano de Rocío de la
Camara, con procedencia Núñez y Juan Pedro Domecq y Díez-D. José Luis Osborne
Vázquez.
Los toros salieron rápidos, adelantándose
un toro colorado en la subida, llegando en solitario a la plaza. Por detrás el
resto de la manada iba muy estirada, alternándose los mansos con los toros. Bonitas
carreras se vieron en todo el recorrido, que aunque se dieron cita bastantes
corredores, había huecos suficientes para poder coger toro.
A continuación se soltaron de
uno en uno dos novillos de capea con dos mansos en cada una de las carreras. Novillos
feos, trotones, que permitieron hacer carreras limpias a los mozos. Después
fueron soltados en la capea de la plaza junto a unas vaquillas.
El encierro se retraso una media
hora, porque a la hora de cerrar todo el recorrido, una de las puertas dejaba
una abertura de medio metro, superior a la permitida en el reglamento. Es una
pena que haya sucedido en Valdemorillo, porque se toman las cosas muy en serio,
pero estas cosas pasan. En teoría todos los recorridos deben ser revisados por
un arquitecto municipal antes de la celebración de los encierros, dando su
consentimiento a este y firmando el acta. Hay en muchos sitios que este hecho
le convierten en un mero trámite administrativo, y es un acto muy importante. Ahora
que todos decimos: “SÍ A LOS NIÑOS EN LOS TOROS”, estos temas deben tenerse muy
en consideración. Con esto no decimos que en Valdemorillo no se haga, porque
nos consta que se cumplen las cosas con un escrupuloso rigor. Lo decimos porque
si en un pueblo que se hacen las cosas bien, no salen perfectas, que puede
pasar en uno que no se hace…luego nos tiramos de los pelos y nos lamentamos que
un toro ha roto una talanquera, o se ha metido por un hueco. Cuidemos estos
aspectos.
Fotos realizadas by Choncho
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