ENCIERRO PORTILLO DE TOLEDO 29/9/13
Como hemos comentado en la entrada
anterior, los encierros de Portillo son particulares. Se corren los toros o
novillos de la corrida todos juntos, pero varias veces por las calles. Como dijimos
en la entrada anterior, esto tiene sus ventajas, y también a muchos
detractores. Se corrieron cuatro novillos de Hijos de Guadalupe Ortega
Cuéllar, ganadería que está en Aranjuez, de encaste Atanasio. Estos novillos
son listos de por sí y aprenden muy rápido, por lo que no creemos que sean el
mejor ganado para soltarlo durante tanto tiempo en la calle y luego torearlo
por chavales que están empezando.
En los corrales eran preciosos, estaban sin hacer cosas raras,
tranquilos, grandes, para novillada picada. No estaban muy hermanados con los tres
mansos. En la primera carrera del encierro, la de ida, los novillos fueron por
delante, rapidísimos, con fuerza. En la vuelta, al salir de la plaza, salieron
algo dubitativos, en grupo, muy unidos, junto a los bueyes.
La bajada fue con los cuatro novillos muy hermanados por
delante y los cabestros andando a bastante distancia. La mejor de las carreras
para los mozos, junto a la anterior de subida. De la plaza fueron saliendo de
uno en uno, quedándose emplazados en la calle, arremetiendo contra el vallado,
siendo recortados y rodados, los novillos fueron aprendiendo y eso por
desgracia se notó por la tarde.
Normalmente no mencionamos los resultados de lo que hacen los
novillos por la tarde, porque el resultado no tiene porqué ser igual. En la
novillada de la tarde toreaban dos chavales (José Cabrera y Julián Nombela) con
pocas corridas a sus espaldas y pasó lo que no queremos nunca que pase, y es
que los dos junto a un subalterno fueron corneados y se quedaron un par de
novillos sin matar. Afortunadamente se recuperan favorablemente de las heridas.
Entendemos cuál es la tradición de Portillo, y como defensores
del festejo popular nos encanta, que se suelten varias veces los toros de la
corrida, pero desde el punto de vista taurino, pensamos que manteniendo la
base, se puede mejorar, creemos que a las novilladas de este estilo deben ir
chavales más fogueados, o novillos de otro tipo de encaste más “dócil”. Pero es
que Portillo intenta conjugar tres cosas muy complicadas y que aplaudimos, buen
ganado en la calle para el festejo popular, encastes con salsa y jóvenes que se
quieren comer el mundo y se la juegan allá a donde van. Normalmente les suele
salir bien, pero el 29 de septiembre lamentaron las graves cogidas y luego el
pueblo quedó insatisfecho por no ver acabar la novillada.
Fotos realizadas by Burraco
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